Paseando por el Albaicín (o Albayzín), sin más pretensiones, sin entrar a ver edificios o museos. Paseando. Sencillamente paseando.
Levantarte y salir con tus hijas y tu mujer a dar una vuelta. Y ver a la gente haciendo la compra. A algunas señoras mayores comprando fruta. A una familia desayunando pan con tomate y aceite en una terraza. A un abuelo atando a su perro. A varios hippies fumando despreocupados, sintiéndose invisibles.
El Albaicín es un barrio del este de Granada, en Andalucía (España).
He leído que hace siglos el Albaicín descendía por San Nicolás hasta orillas del río Darro. Estaba plagada de lujosos cármenes y soberbios baños públicos. Sus calles eran estrechas y pequeñas y había aljibes por todas partes.
La construcción típica del Albaicín es el Carmen (vivienda rodeada con un muro y con huerto o jardín). Algunos son realmente preciosos.
Su máximo esplendor fue durante el reinado Nazarí.
Después de la conquista de Granada por los Reyes Católicos, el Albayzín fue el espacio designado para los musulmanes pero, en pocos años, por mótivos religiosos y políticos, se les acabó expulsando, derribando sus mezquitas y dejando escapar su arte y saberes.
El Albayzín se acuesta sobre la loma de una montaña frente a la Alhambra.
El Albayzín es un mundo aparte, un planeta separado, una joya distinta.
Algunos cármenes te hacen pensar en el paraíso terrenal. Limoneros, árboles frutales, buganvillas y yedras desprendiéndose por las paredes.
Pasamos tres noches en el Aljibe del Albayzín, un alojamiento con encanto. Estuvimos realmente bien. Mis niñas disfrutaron como enanas. Todo les parecía una novedad excitante. Todo les esbozaba una sonrisa.
En las plazas la gente se sentaba en el suelo y escuchaba improvisadas actuaciones callejeras.
El Albayzín es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO. Un patrimonio que sabe a bocadillo de jamón con tomate y a cerveza Alhambra.
Si vas a Granada, sí, claro, tienes que ir al Albaicín.
Un lector de este blog me advirtió que el nombre del barrio en árabe es: Al bayazín (plural del vocablo bayāz) que significa el que caza con el Bāz (halcón). En aquella época uno de los deportes favoritos era la caza. Un apunte más que interesante del que aquí quiero dejar constancia.
Y también tienes que ir al Mirador de San Nicolás. Aunque sólo sea para estar absolutamente de acuerdo con Bill Clinton.
¡Granada es Gra ná!
Precioso cómo lo cuentas.
Muchas gracias Blanca. Te animo a que te suscribas al blog para ser la primera en recibir los nuevos artículos. Me he tomado el verano de vacaciones pero ahora empiezo de nuevo con energías renovadas. Un abrazo fuerte.
No he podido estar por la zona pero queda apuntada en la agenda de mis próximas visitas, me convenciste
Me alegro que te haya convencido. Te gustará, eso seguro.