El Orfanato de elefantes de David Sheldrick en Nairobi es un lugar especial. Realmente especial. Alguien me lo había recomendado y había contratado la excursión sin demasiada convicción. Sin embargo, salí de allí ilusionado como un niño. Más tarde, supe que es uno de los lugares más visitados de la capital keniata.
El orfanato es un proyecto pionero a nivel mundial. Los pequeños paquidermos son rescatados después de que los furtivos hayan matado a sus madres. Los elefantes reciben amor y cariño hasta que se encuentran en condiciones de integrarse, de nuevo, en las manadas salvajes.
El centro abre sólo una hora al día, de 11:00 a 12:00 de la mañana. Acuden decenas de turistas. En esa hora los elefantes beben sus enormes biberones de leche, se revuelcan en el barro y juegan entre ellos y con sus cuidadores.
Al centro le costó mucho tiempo y esfuerzo dar con una fórmula de leche que sustituyese a la leche materna. Al principio, algunos elefantes murieron por no dar con la fórmula adecuada. Pero, al final, dieron con ella y ahora los turistas pueden disfrutar y reírse viendo como los pequeños elefantes toman sus biberones gigantes.
El centro acoge a más de 30 crías de elefante que han quedado huérfanas debido al comercio ilegal de marfil en África. Según cálculos del propio centro un elefante muere cada 15 minutos en el continente por dicho motivo.
Daphne Sheldrick fundó en 1977 «The David Sheldrick Wildlife Trust» en memoria de su marido, David Sheldrick. Éste fué un conocido conservacionista. Creó la Reserva de Tsavo, el parque nacional más extenso de Kenia, y luchó, junto a su mujer, por la supervivencia y bienestar de los animales salvajes (en especial de los elefantes y los rinocerontes).
El orfanato se encuentra dentro del Parque Nacional de Nairobi. En la actualidad es Ángela, la hija de Daphne quien, siguiendo los pasos de sus padres, dirige el centro.
Los cuidadores te cuentan como los elefantes vienen al centro cargados de agresividad y tristeza y cómo ellos juegan con ellos, los cuidan todo el día y les dan leche siempre que la demandan. También cubren a las crías con mantas simulando el calor materno.
Los turistas se sitúan detrás de un pequeño cordel. Asisten, con asombro y deleite, a un espectáculo único. Dificilmente olvidable. Es como ir a una guardería a la hora del recreo.
Se puede apadrinar a las crías por una cantidad anual y, de esta forma, contribuir a los elevados gastos del orfanato.
El proceso de reinserción puede durar hasta 10 años. Lo más complicado es reintegrarlos a la vida salvaje en el Parque Nacional de Tsavo. La reinserción es progresiva y diferente en cada elefante, en función de múltiples factores (como el tamaño del trauma que les supuso la muerte de su madre o su adaptación al entorno).
Todos los elefantes tienen un nombre y un cuidador asignado.
Los cuidadores duermen con los elefantes. El nexo cuidador-elefante intenta emular la íntima relación que une a una madre con su cría.
Se paga una pequeña entrada para cubrir en parte los gastos de la fundación.
Grupos de escolares keniatas asisten también al espectáculo. Nada mejor que inculcarles, desde pequeños, el amor y el respeto a los animales.
Algunos de ellos nos miraban con curiosidad y un cierto recelo.
El tráfico de marfil es un problema de primer orden en África. A pesar de la creciente toma de conciencia, los furtivos siguen teniendo numerosos y poderosos clientes en países como China o Tailandia.
El marfil es utilizado en Asia para elaborar medicinas tradicionales y para fabricar objetos de artesanía. Un kilo de marfil se cotiza a más de 2.000 dólares en el mercado negro. Si pones «tráfico de marfil» en Google algunas fotos son espeluznantes. Hacen a los elefantes auténticas barbaridades con tal de conseguir el preciado marfil.
En el orfanato están libres de todo mal. Libres de los cazadores furtivos. Cuando estás allí y les ves jugar, lo único que sientes, es una ternura infinita.
Dan ganas de entrar y revolcarte con ellos en el barro, mientras les haces todo tipo de carantoñas. Es una pena que no pueda hacerse (aunque es, perfectamente comprensible, que no esté permitido).
En el cartel que figura arriba se describe muy bien el objetivo y la razón de ser del orfanato. Es un buen resumen de lo que es, lo que supone y lo que representa.
A nivel personal, lo que intuía como una turistada, fue una experiencia única e irrepetible. Cuando viajas es un error dejarte llevar por tus prejuicios y manías. Tienes que estar abierto a todo y procurar verlo todo con una mirada limpia e incontaminada.
Para temas de horarios, visitas y demás información práctica, puedes ir a la web oficial del orfanato: https://www.sheldrickwildlifetrust.org/
Y ya sabéis, si vais a Nairobi y os sobran un par de horas, no lo dudéis, id al Orfanato de Elefantes de David Sheldrick.
Muy emotivo, nunca estuve en Africa, pero por alguna razón me fascinan los elefantes…, malísimos los traficantes.
Los elefantes son animales bellos y honestos. El tráfico ilegal de marfil en África es un problema de primer orden y da una idea de hasta donde llegan los hombres por el vil metal. Proyectos como el Orfanato de David Sheldrick ilusionan y constituyen una esperanza para la solución o reducción del problema.
Es cierto que parece una de esas visitas de las que se puede recelar inicialmente pero iniciativas como éste juegan un papel importante en la creación de una mayor, y más firme, conciencia de protección medioambiental, no sólo entre los visitantes extranjeros si no también, y quizá es más importante, entre la población local de los lugares en los que se sitúan.. Los elefantes son animales maravillosos que provocan, como bien dices, una infinita ternura… Salvo si te encuentras a uno, bastante enfadado con el mundo, cara a cara, en una trocha tanzana, ja,ja,ja,ja… Pero está claro que ahí,ellos juegan en casa.
Gracias por el comentario amigo. Lo cierto es que sería un gran avance que este tipo de iniciativas se extendieran y expandieran por todos los rincones del planeta. Juegan un papel muy relevante, como tú bien dices, sobre todo a nivel local. Cuando estuvimos en el orfanato había colegiales de Kenia y me gusto mucho ver cómo abrían los ojos y expresaban su interés. Por cierto que luego vimos elefantes en su hábitat natural y también elefantes cabreados, jeje…uno de ellos considero que el jeep estaba demasiado cerca, arremetió contra nosotros y nos pegó un buen susto.
Muchas gracias por publicar tu experiencia. Estoy planeando un viaje a Nairobi y me gustaría mucho visitar este centro, pero tengo entendido que los horarios de visita son muy restringidos. Tienes mas información de los días y horarios de visita? En su web no hay esta información.
Gracias,
Hola Elvira. Gracias por tu comentario. Desde que yo fuí es posible que los días de visita y horarios se hayan modificado. Lo mejor es que les pases un correo en inglés a ésta dirección: rc-h@africaonline.co.ke. Seguro que ellos te darán la mejor información. Un saludo.
Hola, soy de Chile. Acabo de estar en Nairobi hace unos 10 días y visité el orfanato. Leyendo tu artículo, inmediatamente viajé con la memoria y tuve las mismas ganas de jugar con los pequeños en el barro, tal como en el relato.
¡Felicitaciones por este blog!
Muchas gracias Alvaro. Es cierto que acabas viendo a los pequeños elefantes como si fueran niños jugando en el patio del recreo. Unos niños, además, divertidos y juguetones. Un abrazo desde España.
Todos los animales en su hábitat son inocentes de la maldad del hombre , amo infinitesimalmente a todos los animales, veo este blog y me invade la impotencia y la tristeza de que en el siglo XXI no se haya podido disminuir el tráfico de Marfil , no entiendo como es que no se multan a países como China Y Tailandia por estas agresiones, ellos protegen a los pandas porque deben destruir a Elefantes?? es inexplicable ..todos los animales en la naturaleza merecen su vida…En este momento acabo de terminar de ver el documental de Aisha como fué rescatada por el Orfanto y su vínculo con Daphne he llorado terriblemente y es totalmente cierto los animales insisto tienen su institnto salvaje pero son inocentes y si pueden morir de tristeza… me encantó el documental.. Soy de Buenos Aires Argentina adicta a todooooos los programas d Nat Geo y Animal Planet amo a todos los animales y muero por ir a internarme algún día en algún reservorio donde pueda colaborar con la protección de animales…Gracias por compartir este blog
Gracias por tu aportación Míriam. Muchas veces los intereses económicos se alzan por encima de los intereses de los animales y quienes salen perjudicados siempre son estos últimos. Te animo a que participes en los múltiples programas de ayuda a los animales que existen. Un abrazo.
Hola Miriam, hace años atrás vi el mismo documental de Aisha en Animal Planet, y al igual que tú, éste me caló hondo. Lamentablemente no lo he vuelto a ver y no lo he podido encontrar en internet. Tú recuerdas el nombre?
Hola, estoy interesada en ir como voluntaria a ayudar en la reserva. Alguien me puede decir como puedo contactar con ellos?
Gracias
Hola María Jesús. La verdad es que no sé si existe esa posibilidad. Pregúntales directamente a ellos. Su correo electrónico es info@sheldrickwildlifetrust.org. Espero que te sirva de ayuda. Gracias por tu comentario y saludos.
Pues sí, Jaime, es una experiencia única. Una visión muy diferente a la que estamos acostumbrados. A mi una de las cosas que más me gustó fue cuando los pequeños elefantes se tomaban sus biberones gigantes. Saludos.
Mil gracias por mostrar algo tam increible y hermoso.
Ojala el hombre dejara de destruir lo que no le pertenece…somos una especie mas no los dueños de la vida.
Muchas gracias ! hermoso
sabes cual es el precio de la entrada?
¡Gracias! El precio de la entrada habrá cambiado, lógicamente, desde que yo estuve por allí. En su web no he conseguido encontrarlo. Yo les pasaría un correo. Te dejo su mail: info@sheldrickwildlifetrust.org
Hola
quisiera saber si tienes que tomar un tour para ir o puedes hacerlo de tu cuenta.
Cual es la mejor opción?
Gracia
Hola Alberto. Yo lo hice dentro de un viaje organizado pero también puedes ir por tu cuenta. Entiendo que cualquiera de las dos opciones es buena. Saludos.
En las fotos que se publicaron, vi alumnos de colegios , haciendo una visita al Orfanato, me dio curiosidad, – si hace tanto calor – , porque los uniformes de los niños tienen pullover de lana y gorro. Pueda ser que este mal informada , respecto de la temperatura. En Septiembre estare por ahi.-
Gracias
Olga
Sí, había una visita de un colegio local. Y creo recordar que hacía calor, yo, al menos, iba en camiseta. Yo diría que tiene que ver con los diferentes conceptos de temperatura, entre la gente local, y los turistas occidentales. Saludos.