Milford Sound: El escondido corazón salvaje de Nueva Zelanda

Es uno de los lugares del mundo dónde más llueve. De hecho, lo raro es que no llueva

Milford Sound: El secreto de los glaciares

Milford Sound es un fiordo milenario. Esculpido por glaciares hace más de 15.000 años. Su atmósfera es mística e imponente. No es casualidad que el escritor británico Rudyard Kipling lo calificase como «la octava maravilla del mundo».

El fiordo es hogar de delfines, focas, pingüinos y una gran diversidad de aves

El nombre real de Milford Sound

El nombre maorí es Piopiotahi. Los maoríes son los habitantes primigenios de Nueva Zelanda.

Este nombre está relacionado con la leyenda del pájaro piopio, un ave ya extinta en Nueva Zelanda (hay varias en su historia). La leyenda cuenta que el héroe maorí Tū-te-raki-whānoa (intenta pronunciarlo) buscaba a su amada en este fiordo, y el canto del piopio le guio en su búsqueda.

Milford Sound forma parte del PN de Fiordland,es Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO

Los orgullosos Maoríes y los mezquinos británicos

Los maoríes eran los habitantes originarios de Nueva Zelanda. Era su tierra. Y, entonces, llegaron los británicos. Mataron a muchos y al resto los marginaron y excluyeron socialmente. Yo estuve 15 días en Nueva Zelanda, me crucé en coche de alquiler las dos islas, y lo que vi en relación a los maoríes, me dio mucha pena. Que nadie me cuente películas, yo lo vi. Es cierto que el gobierno actual, lleva tiempo haciendo esfuerzos de integración y reconocimiento de su cultura, pero lo que hicieron los británicos es un hecho histórico incontestable.

En Milford Sound habita una especie de pingüino llamada tawaki

Pero bueno, para algún incauto no muy interesado en la historia, les diré que en el actual EE.UU, los americanos, herederos naturales de los británicos, diezmaron a la población india, haciendo auténticas salvajadas (daban dinero por sus cabelleras y su lema era «el único indio bueno es el indio muerto») y, hoy en día, tienen a una gran mayoría encerrados en reservas, muchos de ellos en la semi-indigencia, desempleados y alcoholizados. En Canadá, obligaron a los indígenas a abandonar su cultura y costumbres e ir a «Escuelas» donde abusaron, física, sexual y emocionalmente de ellos, niños incluidos. Un escandalo que dura hasta nuestros días y que ha reconocido el propio gobierno canadiense.

Y esto es lo que hicieron los británicos en sus colonias (investigad sobre el tema, si queréis. Está todo documentado). Si te cuentan otra cosa, son cuentos chinos.

Aún recuerdo como las montañas «lloraban». Decenas de cascadas de agua descendían por los riscos.

El fenómeno del “agua negra”

Una de las rarezas de Milford Sound es su capa doble de agua: en la superficie hay una capa de agua dulce procedente de la lluvia, mientras que, debajo de esa capa, se encuentra el agua salada del océano. Este fenómeno crea una ilusión óptica extraña.

Milford Sound tiene una profundidad de más de 400 metros y se extiende por 16 kilómetros hacia el mar de Tasmania.

Milford Sound: Un viaje hacia lo primitivo

Visitar Milford Sound es una experiencia inmersiva. No sólo puedes cogerte un crucero para visitarlo (lo que nosotros hicimos) si no que, también, si eres más aventurero y osado, puedes hacer el famoso Milford Track (te lleva, al menos, unos 4 días,  y no nos encajaba en el calendario, pero recuerdo un par de turistas que hablaban maravillas. Y me dieron mucha envidia, tiene que ser una pasada hacerlo).

Dos de las cascadas más famosas de Milford Sound son las cataratas de Bowen y las cataratas de Stirling. La primera tiene 162 metros de altura y la segunda 151 metros.

Información práctica

Aquí os dejo una web con info práctica para que la echéis un vistazo:

https://www.milford-sound.co.nz/

No está en la lengua de Cervantes, por cierto…

 

Compártelo

Sé el primero en recibir mis posts suscribiéndote a la newsletter:

Loading

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *